sábado, 7 de febrero de 2009

PROPÓSITOS

Pasión por la lectura

Aprendí a leer antes de acudir a la escuela. Mi hermana, con vocación de maestra, me enseñó a hacerlo en su enciclopedia Álvarez, libro que, más adelante leí casi por completo.
Leía todo lo que caía en mis manos, los escasos libros que había en el hogar, periódicos y revistas atrasados, libros de texto, tebeos... Las letras eran mis mejores jugetes, leía sin medida ni descanso. Cuando íbamos de visita, lo primero que miraba era si había algo para leer en la casa y pasaba el tiempo con un libro, una revista o un tebeo entre las manos, me leí la biblia casi entera y me gustaba ir a la casa donde mi hermana trabajaba en Valladolid para bucear en el primer diccionario enciclopedico que conocí. Mi padre decía que tanto leer me sorbería el seso.

Y la escritura

Pero ocurrió que le tome gusto a escribir. En la escuela primero y en el colegio después, el maestro y los sucesivos profesores de lengua y literatura, ponían mis redacciones como ejemplo y me alentaban a leer y escribir. A los once años publicaron en Bilbao, en la revista del centro regido por los hermanos gabrielistas donde estudiaba, mi primer trabajo impreso, elegido entre todos los alumnos de primero de bachillerato. Me sentía escritor. Y comencé a soñar.
Pero la vida me llevó por otros derroteros.

La poesía

A los catorce años comencé a escribir poesía. Un compañero de clase me enseñó un cuaderno con sus poemas y yo pensé que podía hacerlo mejor que él. Y, poco poco, le fuí tomando aficción. Leí a Lorca, a Machado, a Juan Ramón, a Miguel Hernández, entre otros, conseguí algún libro de preceptiva literaria y escribí sin descanso en hojas sueltas, en cuadernos. Publiqué por primera vez mis versos en el Diario Regional de Valladolid y, a los 18 años, di mi primer recital poético en la Casa de Cervantes de la aquella ciudad castellana. Me sentía poeta y quise publicar un libro del que conservo el prólogo que, amablemente, escribió Carmen Isabel Santamaría del Rey. Pero la poesía, entonces como ahora, no vendía y si uno quería publicar, tenía que costearse la edición, cosa que en aquellos momentos no me podía permitir.
Fue en Barcelona, años después, 1979, cuando vio la luz "Orto", mi primer libro y en 1989, "De donde nace el viento", segundo y último libro editado. Desde entonces he seguido escribiendo, buscando mi lugar dentro del panorama poético, publicando de manera esporádica y dispersa, dejándome vencer a veces por el desaliento y la desidia.

Acerca de este blog

En 2006, comencé un blog, un verso como el pan de cada día, en el que pretendía dar a conocer mi trabajo poético. Ahora lo completo con éste en el que iré publicando los poemas de mis libros, junto a otros inéditos, para mantener viva la llama que encendí hace tantos años en las tierras castellanas donde mi ojos se abrieron a la luz y a la poesía.
Espero no defraudar a los ocasionales lectores.

2 comentarios:

  1. muchisimas gracias por pasarte
    sinceramente, no creí que nadie se iba a passar

    intentaré pasarme a menudo a leer tus textos ;)

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  2. Gracias por tu visita a mi blog, aquí estaré para ir siguiendo tus pasos poéticos.

    Un abrazo
    MArian

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